Tratamos cualquier lesión articular, bien accidental como esguinces articulares o lesiones meniscales y tendinosas, bien dolores o molestias sin causa conocida de columna, hombro, cadera, rodilla, tobillo etc. que nos incomodan y limitan así como por supuesto cuando sospechemos o sepamos la existencia de algún grado de artrosis en la que nunca debemos dejar evolucionar y padecer hasta que incluso nos sugieran que una operación de prótesis sustituya por ejemplo a su rodilla, siendo esto el fracaso de la medicina clínica habitual.
Nuestro objetivo es analizar los factores mecánicos estructurales de la persona, sus deficiencias y sus excesos físicos, nutricionales y necesidades biológicas para aportar junto a los tratamientos más avanzados en la protección del cartílago articular y su mejora, todos los factores que, juntos, incidan en un mejor funcionamiento de la articulación, para que esta, en su conjunto, responda lo mejor posible. Y se consigue. El tratamiento en la artrosis es muy comparable a la paella, donde sabemos que todos y cada uno de los ingredientes, su sucesivo procesamiento y ajuste nos llevaran al excelente resultado final, o no, si lo descuidamos. No es echar arroz y ya está, son muchas más cosas. Como en la artrosis.